El calamar vampiro ataca de nuevo: Scam más Devious Los Mega Bancos embargo - traducido con google de rollingstone.com
Los bancos ya no sólo financian la industria pesada. Ellos en realidad están comprando y inventar grandes estafas, más audaces y más miedo que nunca
PorMatt Taibbi
12 de febrero 2014 11:00 am, hora
El calamar vampiro ataca de nuevo: Scam más Devious Los Mega Bancos embargo
todo lo que el vacío legal que destruyó el mundo. Es 1999, el final de los años de Clinton. Mientras que el resto de América se obsesiona con Monica Lewinsky, Columbine y bíceps de Mark McGwire, el Congreso está febrilmente elaborando lo que aún podría llegar a ser una de las leyes más transformadoras de la historia de nuestra economía - una ley que haría posible una concentración mayor de recursos financieros y el poder industrial de lo que hemos visto en más de un siglo.
Matt Taibbi en la Great Machine Bubble estadounidense
Pero lo más loco es que nadie en el momento bastante sabía. La mayoría de los observadores en el Capitolio pensaron que la Ley de Modernización de Servicios Financieros de 1999 - también conocida como la Ley Gramm-Leach-Bliley - fue sólo el último y más audaz en una larga serie de folletos de desregulación de Wall Street, que había comenzado en los años de Reagan.
Wall Street había pasado gran parte de esa discusión era que los bancos de Estados Unidos tenían que ser más grande y más malo, con el fin de competir a nivel mundial con los gigantes financieros de Alemania y de estilo japonés, que eran supuestamente a punto de tragarse a todo el negocio bancario mundial. Así que a través de lacayos legislativos como entusiasta de desregulación republicana con la cara roja Phil Gramm, cabilderos bancarios estaban empujando una nueva ley diseñada para acabar con más de 60 años de regulación financiera lecho de roca. La clave se deroga - o "modificar", como los defensores de facturas ponen - la famosa Ley Glass-Steagall que separa los banqueros y corredores de bolsa, que había sido aprobada en 1933 para evitar conflictos de intereses en el sector financiero que condujo a la Gran Depresión. Ahora, los bancos comerciales se les permitiría fusionarse con bancos de inversión y compañías de seguros, creando megafirmas financieros potencialmente mucho más poderoso que nunca había existido en América.
Todo esto era lo suficientemente gran noticia en sí misma. Pero se necesitaría media generación - hasta ahora, básicamente - de entender la parte más explosiva de la ley, que, además, legalizó las nuevas formas de monopolio, lo que permite a los bancos a fusionarse con la industria pesada. Una pequeña provisión en el proyecto de ley también permite a los bancos comerciales para profundizar en cualquier actividad que sea "complementario a una actividad financiera y no representa un riesgo importante para la seguridad o solidez de las instituciones de depósito o el sistema financiero en general." Como complemento a una actividad financiera. ¿Qué demonios significa eso?
Los federales vs Goldman
"Desde la perspectiva de los bancos", dice Saule Omarova, profesor de derecho en la Universidad de Carolina del Norte ", casi todo lo que se considera complementaria a una actividad económica."
Quince años más tarde, de hecho, ahora parece que Wall Street y sus abogados tomó la palabra a ser un sinónimo de campañas despiadadas de la dominación del mundo. "Nadie conocía el alcance que tendría en la economía real", dice el senador Sherrod Brown de Ohio. Ahora una voz líder en el Capitolio contra las disposiciones ocultas, Brown votó por Gramm-Leach-Bliley como miembro del Congreso, junto con todos menos otros 72 miembros de la Cámara. "Apuesto a que incluso algunas de las personas que eran partidarios del proyecto de ley tenía ni idea."
Hoy en día, los bancos como Morgan Stanley, JP Morgan Chase y Goldman Sachs poseen los petroleros, los aeropuertos administrados y controlar grandes cantidades de carbón, el gas natural, el combustible para calefacción, energía eléctrica y los metales preciosos. Ellos igualmente se pueden encontrar ahora ejercer un control directo sobre la oferta de toda una galaxia de materias primas esenciales para la industria mundial y para la sociedad en general, incluyendo todo, desde productos alimenticios a los metales como el zinc, el cobre, el estaño, el níquel y, lo más infame gracias a una reciente de alto perfil escándalo, de aluminio. Y lo están haciendo, no sólo aquí, sino también en el extranjero: En Dinamarca, miles de personas salieron a las calles en señal de protesta en las últimas semanas, las banderas-vampire squid en la mano, cuando llegó la noticia de que Goldman Sachs estaba a punto de comprar una participación del 19 por ciento en Dong Energy, un proveedor nacional de electricidad. El furor inspirado renuncias masivas de los ministros de la coalición gobernante de gobierno, ya que el público danés se preguntó cómo un banco de inversión estadounidense, posiblemente, podría tener tanta influencia en la red estatal de energía.
Hay intereses más eclécticas, también. Después del 9/11, lo encontramos preocupante cuando los extranjeros comenzaron a entrar en el negocio de administrar los puertos, pero ha habido poca controversia ya que los bancos han hecho lo mismo, e incluso empezó a investigar en otras actividades con implicaciones de seguridad nacional - Goldman Sachs, por ejemplo, es al parecer, ahora en el negocio de uranio, una noticia que atrajo a unos cuantos titulares.
La guerra de Wall Street
Pero los bancos no sólo están comprando cosas, que están comprando los procesos industriales enteros. Están comprando el petróleo que todavía hay en la tierra, los camiones cisterna que lo mueven a través del mar, las refinerías que lo convierten en el combustible y las tuberías que llevan a su casa. Entonces, sólo por diversión, están también apostando por el tiempo y la eficiencia de estos mismos procesos industriales en los mercados financieros - compra y venta de las reservas de petróleo en la bolsa de valores, los futuros del petróleo en el mercado de futuros, swaps en el mercado de swaps, etc .
Permitir que una empresa para controlar el suministro de materias primas físicas fundamentales, así como el comercio de los productos financieros que podrían estar relacionados con los mercados, es una invitación abierta para cometer manipulación de masas. Es algo parecido a dejar que los dueños del casino que toman libro sobre juegos de la NFL durante la semana también se entrenan todos los equipos de los domingos.
La situación se ha abierto la caja de los horribles nuevas posibilidades de corrupción de Pandora, pero ha sido difícil para el público a notar, ya que los reguladores han luchado para poner la más mínima mella en la edad avanzada, las estafas más habituales de Wall Street. Tan sólo en los últimos años hemos visto una explosión de escándalos - desde el multitrillion dólares Libor saga (principales tasas de interés mundiales juegos bancos internacionales), al fiasco en moneda extranjera de intercambio más reciente (muchos de los mismos bancos sospechosos de aparejo precios en los mercados de divisas $ 5,3 billones-a-día), a los escándalos que involucran menores manipulación de swaps de tasas de interés y los precios del oro y de la plata.
Pero esos son esquemas puramente financieros. En estas nuevas formas, incluso más temibles de las manipulaciones, los bancos que poseen cadenas enteras de los intereses empresariales físicos han sido capturados precios de rigging en esas industrias. Por ejemplo, tan sólo en los últimos dos años, las multas superiores a 400 millones de dólares han sido recaudados en contra de ambos JPMorgan Chase y Barclays por presuntamente manipular el suministro de electricidad en varios estados, incluyendo California. En el caso de Barclays, que está disputando la multa, los reguladores afirman precios fueron manipuladas para ayudar al banco ganar apuestas financieras que había formulado en estos mismos mercados energéticos.
Y el verano pasado, The New York Times describió cómo Goldman Sachs fue capturado retrasando sistemáticamente la entrega de los metales de una red de almacenes que poseía con el fin de subir los alquileres y artificialmente aumentar los precios.
Puede que no haya sido sorprendido de que Goldman quedó atrapado estafar al mundo de nuevo, pero sin duda fue noticia a un montón de gente que un banco de inversión, sin experiencia industrial, a sólo cinco años retirado de un plan de rescate federal, almacena y controla bastante de aluminio de Estados Unidos suministrar a afectar a los precios mundiales.
¿Cómo fue posible todo esto? ¿Y quién firmó en él?
Mediante la explotación de las lagunas existentes en una década y media de edad-pieza de legislación financiera densa, Wall Street se ha efectuado un cambio revolucionario que los ciudadanos estadounidenses nunca discuten, debaten o preparados para, y ciertamente nunca se permita explícitamente de una manera significativa: la fusión al por mayor de las altas finanzas con la industria pesada. Esta reorganización blitzkrieg de nuestra economía ha dejado a millones de estadounidenses enfrentan una mezcla heterogénea de nuevos problemas terriblemente inesperados. ¿Tenemos una estructura reguladora en lugar de mirar hacia fuera para estas nuevas formas de manipulación? (Respuesta: No lo sabemos.) Y dado que el sector bancario que viene tan cerca de arruinar la economía mundial hace cinco años se ha ampliado enormemente su huella, que está a cargo de prevenir la próxima crisis?
En este mundo feliz, nadie lo sabe. Por otra parte, todo lo que hemos hecho, ya es demasiado tarde para tener un referéndum sobre el mismo. Garrett Wotkyns, un abogado de acción de clase con sede en Arizona que ha pasado más de un año investigando la participación de los bancos en los mercados de metales y está demandando a Goldman y otros a través de la caja de aluminio en nombre de los dos principales fabricantes, lo pone de esta manera: " Es como esa línea en The Dark Knight Rises ", dice. "'La tormenta no viene. La tormenta ya está aquí.'"
nota original en ingles
PorMatt Taibbi
12 de febrero 2014 11:00 am, hora
El calamar vampiro ataca de nuevo: Scam más Devious Los Mega Bancos embargo
todo lo que el vacío legal que destruyó el mundo. Es 1999, el final de los años de Clinton. Mientras que el resto de América se obsesiona con Monica Lewinsky, Columbine y bíceps de Mark McGwire, el Congreso está febrilmente elaborando lo que aún podría llegar a ser una de las leyes más transformadoras de la historia de nuestra economía - una ley que haría posible una concentración mayor de recursos financieros y el poder industrial de lo que hemos visto en más de un siglo.
Matt Taibbi en la Great Machine Bubble estadounidense
Pero lo más loco es que nadie en el momento bastante sabía. La mayoría de los observadores en el Capitolio pensaron que la Ley de Modernización de Servicios Financieros de 1999 - también conocida como la Ley Gramm-Leach-Bliley - fue sólo el último y más audaz en una larga serie de folletos de desregulación de Wall Street, que había comenzado en los años de Reagan.
Wall Street había pasado gran parte de esa discusión era que los bancos de Estados Unidos tenían que ser más grande y más malo, con el fin de competir a nivel mundial con los gigantes financieros de Alemania y de estilo japonés, que eran supuestamente a punto de tragarse a todo el negocio bancario mundial. Así que a través de lacayos legislativos como entusiasta de desregulación republicana con la cara roja Phil Gramm, cabilderos bancarios estaban empujando una nueva ley diseñada para acabar con más de 60 años de regulación financiera lecho de roca. La clave se deroga - o "modificar", como los defensores de facturas ponen - la famosa Ley Glass-Steagall que separa los banqueros y corredores de bolsa, que había sido aprobada en 1933 para evitar conflictos de intereses en el sector financiero que condujo a la Gran Depresión. Ahora, los bancos comerciales se les permitiría fusionarse con bancos de inversión y compañías de seguros, creando megafirmas financieros potencialmente mucho más poderoso que nunca había existido en América.
Todo esto era lo suficientemente gran noticia en sí misma. Pero se necesitaría media generación - hasta ahora, básicamente - de entender la parte más explosiva de la ley, que, además, legalizó las nuevas formas de monopolio, lo que permite a los bancos a fusionarse con la industria pesada. Una pequeña provisión en el proyecto de ley también permite a los bancos comerciales para profundizar en cualquier actividad que sea "complementario a una actividad financiera y no representa un riesgo importante para la seguridad o solidez de las instituciones de depósito o el sistema financiero en general." Como complemento a una actividad financiera. ¿Qué demonios significa eso?
Los federales vs Goldman
"Desde la perspectiva de los bancos", dice Saule Omarova, profesor de derecho en la Universidad de Carolina del Norte ", casi todo lo que se considera complementaria a una actividad económica."
Quince años más tarde, de hecho, ahora parece que Wall Street y sus abogados tomó la palabra a ser un sinónimo de campañas despiadadas de la dominación del mundo. "Nadie conocía el alcance que tendría en la economía real", dice el senador Sherrod Brown de Ohio. Ahora una voz líder en el Capitolio contra las disposiciones ocultas, Brown votó por Gramm-Leach-Bliley como miembro del Congreso, junto con todos menos otros 72 miembros de la Cámara. "Apuesto a que incluso algunas de las personas que eran partidarios del proyecto de ley tenía ni idea."
Hoy en día, los bancos como Morgan Stanley, JP Morgan Chase y Goldman Sachs poseen los petroleros, los aeropuertos administrados y controlar grandes cantidades de carbón, el gas natural, el combustible para calefacción, energía eléctrica y los metales preciosos. Ellos igualmente se pueden encontrar ahora ejercer un control directo sobre la oferta de toda una galaxia de materias primas esenciales para la industria mundial y para la sociedad en general, incluyendo todo, desde productos alimenticios a los metales como el zinc, el cobre, el estaño, el níquel y, lo más infame gracias a una reciente de alto perfil escándalo, de aluminio. Y lo están haciendo, no sólo aquí, sino también en el extranjero: En Dinamarca, miles de personas salieron a las calles en señal de protesta en las últimas semanas, las banderas-vampire squid en la mano, cuando llegó la noticia de que Goldman Sachs estaba a punto de comprar una participación del 19 por ciento en Dong Energy, un proveedor nacional de electricidad. El furor inspirado renuncias masivas de los ministros de la coalición gobernante de gobierno, ya que el público danés se preguntó cómo un banco de inversión estadounidense, posiblemente, podría tener tanta influencia en la red estatal de energía.
Hay intereses más eclécticas, también. Después del 9/11, lo encontramos preocupante cuando los extranjeros comenzaron a entrar en el negocio de administrar los puertos, pero ha habido poca controversia ya que los bancos han hecho lo mismo, e incluso empezó a investigar en otras actividades con implicaciones de seguridad nacional - Goldman Sachs, por ejemplo, es al parecer, ahora en el negocio de uranio, una noticia que atrajo a unos cuantos titulares.
La guerra de Wall Street
Pero los bancos no sólo están comprando cosas, que están comprando los procesos industriales enteros. Están comprando el petróleo que todavía hay en la tierra, los camiones cisterna que lo mueven a través del mar, las refinerías que lo convierten en el combustible y las tuberías que llevan a su casa. Entonces, sólo por diversión, están también apostando por el tiempo y la eficiencia de estos mismos procesos industriales en los mercados financieros - compra y venta de las reservas de petróleo en la bolsa de valores, los futuros del petróleo en el mercado de futuros, swaps en el mercado de swaps, etc .
Permitir que una empresa para controlar el suministro de materias primas físicas fundamentales, así como el comercio de los productos financieros que podrían estar relacionados con los mercados, es una invitación abierta para cometer manipulación de masas. Es algo parecido a dejar que los dueños del casino que toman libro sobre juegos de la NFL durante la semana también se entrenan todos los equipos de los domingos.
La situación se ha abierto la caja de los horribles nuevas posibilidades de corrupción de Pandora, pero ha sido difícil para el público a notar, ya que los reguladores han luchado para poner la más mínima mella en la edad avanzada, las estafas más habituales de Wall Street. Tan sólo en los últimos años hemos visto una explosión de escándalos - desde el multitrillion dólares Libor saga (principales tasas de interés mundiales juegos bancos internacionales), al fiasco en moneda extranjera de intercambio más reciente (muchos de los mismos bancos sospechosos de aparejo precios en los mercados de divisas $ 5,3 billones-a-día), a los escándalos que involucran menores manipulación de swaps de tasas de interés y los precios del oro y de la plata.
Pero esos son esquemas puramente financieros. En estas nuevas formas, incluso más temibles de las manipulaciones, los bancos que poseen cadenas enteras de los intereses empresariales físicos han sido capturados precios de rigging en esas industrias. Por ejemplo, tan sólo en los últimos dos años, las multas superiores a 400 millones de dólares han sido recaudados en contra de ambos JPMorgan Chase y Barclays por presuntamente manipular el suministro de electricidad en varios estados, incluyendo California. En el caso de Barclays, que está disputando la multa, los reguladores afirman precios fueron manipuladas para ayudar al banco ganar apuestas financieras que había formulado en estos mismos mercados energéticos.
Y el verano pasado, The New York Times describió cómo Goldman Sachs fue capturado retrasando sistemáticamente la entrega de los metales de una red de almacenes que poseía con el fin de subir los alquileres y artificialmente aumentar los precios.
Puede que no haya sido sorprendido de que Goldman quedó atrapado estafar al mundo de nuevo, pero sin duda fue noticia a un montón de gente que un banco de inversión, sin experiencia industrial, a sólo cinco años retirado de un plan de rescate federal, almacena y controla bastante de aluminio de Estados Unidos suministrar a afectar a los precios mundiales.
¿Cómo fue posible todo esto? ¿Y quién firmó en él?
Mediante la explotación de las lagunas existentes en una década y media de edad-pieza de legislación financiera densa, Wall Street se ha efectuado un cambio revolucionario que los ciudadanos estadounidenses nunca discuten, debaten o preparados para, y ciertamente nunca se permita explícitamente de una manera significativa: la fusión al por mayor de las altas finanzas con la industria pesada. Esta reorganización blitzkrieg de nuestra economía ha dejado a millones de estadounidenses enfrentan una mezcla heterogénea de nuevos problemas terriblemente inesperados. ¿Tenemos una estructura reguladora en lugar de mirar hacia fuera para estas nuevas formas de manipulación? (Respuesta: No lo sabemos.) Y dado que el sector bancario que viene tan cerca de arruinar la economía mundial hace cinco años se ha ampliado enormemente su huella, que está a cargo de prevenir la próxima crisis?
En este mundo feliz, nadie lo sabe. Por otra parte, todo lo que hemos hecho, ya es demasiado tarde para tener un referéndum sobre el mismo. Garrett Wotkyns, un abogado de acción de clase con sede en Arizona que ha pasado más de un año investigando la participación de los bancos en los mercados de metales y está demandando a Goldman y otros a través de la caja de aluminio en nombre de los dos principales fabricantes, lo pone de esta manera: " Es como esa línea en The Dark Knight Rises ", dice. "'La tormenta no viene. La tormenta ya está aquí.'"
nota original en ingles
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