Protestas chinas amenazan lazos comerciales con Japón #divisasweb #forexarg #forex
Varias de las empresas japonesas más importantes suspendieron su actividad en territorio chino a causa de los ataques a sus instalaciones.
Las protestas por la disputa sobre las islas del mar de China Oriental amenazan con enfriar los lazos comerciales entre las dos mayores economías de Asia.
Los ataques violentos de manifestantes chinos contra sedes fabriles de compañías niponas provocaron la paralización temporal de la actividad en el país de empresas como Panasonic, Canon, Honda, o Mazda.
Aunque aún no se han evaluado los daños, estas firmas decidieron el cierre temporal en suelo chino hasta ver cómo evolucionan los acontecimientos.
En la edición internacional del Diario del Pueblo, principal periódico del Partido Comunista Chino, se afirma que aunque Pekín ha sido siempre "extremadamente cauto a la hora de jugar la carta económica" podría recurrir a una respuesta comercial si crece la disputa.
"Si Japón continúa con sus provocaciones, entonces China recogerá el guante", se puede leer en el periódico.
Aniversario
Las agresiones a tiendas y fábricas japonesas hacen temer el impacto que pueden tener en las inversiones niponas en China.
Los analistas aprecian, además, una subida sostenida del precio de la mano de obra en el gigante asiático, considerado como una importante base manufacturera de bajo costo.
Sumado a las hostilidades, esto podría incentivar a Japón a mirar más allá de China para su expansión económica.
"Podrían empezar a considerar extender sus operaciones manufactureras a Tailandia o a otras naciones que reciban con más agrado las inversiones japonesas", dijo a la BBC Shaun Rein, director de un grupo de investigación de mercado en China.
Además, advirtió el analista, "las relaciones comerciales se verán afectadas si continúan las protestas, seguro".
Por su parte, el gobierno japonés teme que las airadas manifestaciones se amplien el martes, cuando se recuerda un nuevo aniversario de la ocupación japonesa de la región nororiental de China en 1931.
Boicot
Los llamamientos a boicotear tiendas y productos nipones proliferan por las calles chinas y por internet.
En un popular mercado de Pekín un cartel reza: "El Mercado de la Seda boicotea los productos japoneses".
Las protestas se extendieron en China durante el pasado fin de semana, y comenzaron después de que Japón anunciara su intención de comprar tres islotes de un disputado archipiélago en el mar de China Oriental.
Los dos países reclaman la soberanía de las islas, que están deshabitadas pero - se cree - albergan importantes recursos naturales y energéticos.
nota original
Las protestas por la disputa sobre las islas del mar de China Oriental amenazan con enfriar los lazos comerciales entre las dos mayores economías de Asia.
Los ataques violentos de manifestantes chinos contra sedes fabriles de compañías niponas provocaron la paralización temporal de la actividad en el país de empresas como Panasonic, Canon, Honda, o Mazda.
Aunque aún no se han evaluado los daños, estas firmas decidieron el cierre temporal en suelo chino hasta ver cómo evolucionan los acontecimientos.
En la edición internacional del Diario del Pueblo, principal periódico del Partido Comunista Chino, se afirma que aunque Pekín ha sido siempre "extremadamente cauto a la hora de jugar la carta económica" podría recurrir a una respuesta comercial si crece la disputa.
"Si Japón continúa con sus provocaciones, entonces China recogerá el guante", se puede leer en el periódico.
Aniversario
Las agresiones a tiendas y fábricas japonesas hacen temer el impacto que pueden tener en las inversiones niponas en China.
Los analistas aprecian, además, una subida sostenida del precio de la mano de obra en el gigante asiático, considerado como una importante base manufacturera de bajo costo.
Sumado a las hostilidades, esto podría incentivar a Japón a mirar más allá de China para su expansión económica.
"Podrían empezar a considerar extender sus operaciones manufactureras a Tailandia o a otras naciones que reciban con más agrado las inversiones japonesas", dijo a la BBC Shaun Rein, director de un grupo de investigación de mercado en China.
Además, advirtió el analista, "las relaciones comerciales se verán afectadas si continúan las protestas, seguro".
Por su parte, el gobierno japonés teme que las airadas manifestaciones se amplien el martes, cuando se recuerda un nuevo aniversario de la ocupación japonesa de la región nororiental de China en 1931.
Boicot
Los llamamientos a boicotear tiendas y productos nipones proliferan por las calles chinas y por internet.
En un popular mercado de Pekín un cartel reza: "El Mercado de la Seda boicotea los productos japoneses".
Las protestas se extendieron en China durante el pasado fin de semana, y comenzaron después de que Japón anunciara su intención de comprar tres islotes de un disputado archipiélago en el mar de China Oriental.
Los dos países reclaman la soberanía de las islas, que están deshabitadas pero - se cree - albergan importantes recursos naturales y energéticos.
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